miércoles, 1 de abril de 2015

Un poema de Saúl González V






BLUES

Hoy tengo la lengua
atada a mis piernas
como un grillete.

Quiero la fuerza de una mosca
para arrojarla a un río.
Subo una y otra vez
por la falda de la melancolía. 

Cuando llego a su seno,
abrigo convexo,
menguo hasta convertirme en bebé
y me quedo dormido.


Hoy me cabe una catedral en el pecho,
sin santos ni curas.




Desde el Callejón del Gato

2 comentarios:

  1. Qué bueno Saúl!!A mi me cabe en el pecho el Fello Meza, sin jugadores ni árbitros jajaja!

    ResponderEliminar
  2. interesante!!
    gracias por compartir
    un abrazo

    ResponderEliminar