miércoles, 24 de octubre de 2012




El Río

     El río parece encriptado
tumbas llenas de mora
y este es el cielo
simple como una esfera
que gira.

He meditado sobre los muertos
los he temido

“…………Cuando pases por las aguas los ríos no te ahogarán,
cuando pases por el fuego, no te quemarás…”

Pero vi mi cuerpo como una tea
todavía los gritos retumban

-Mamá yo quiero que me quemen
-Pero en la resurrección dónde estarán tus huesos?

Quiero subir al aire y envenenarlo todo
Eva ven y hazlo conmigo
Matémoslo mientras duerme

El artista se aferra a la estatua,
duerme con ella,
sigo mi ruta
a la orilla de la calle
él mata los hurones

Y en la pantalla él mueve su cuerpo
- Ven aquí… come on baby light my fire!
El cuerpo se enciende

El mito esta muerto



A 100 km/hora

Los faros se prenden
en el mar de secreciones
nocturnas.
Sobre la arena del desierto
trepa la luna azul.
Viste la sombra.

En la pizarra  esta mi sueño:
el muchacho con cuernos
 lame mi frente.

Y despierto asustada con
cuerpos rotos en el firmamento.

Apegados al pecho de
los perros,
nos duele morder y
succionar.

Hace  unos años,
desde el último piso,
vi la ciudad desierta,
insignificante…

El pájaro termina su cena,
acaricia su cuerpo.
Lacerado por alambres

En la cima él le dijo
-todo esto te daré-
pero… ¿cómo lo iba a desear?

¡La tierra parece más seca!
Vimos los grandes reinos,
pero todo estaba muerto.

Bajé del monte,
me acerqué a un cementerio.
La tumba de mi abuelo era la más pequeña,
la más pobre.

-Todo esto te daré si postrado me adorares-
¿pero cómo lo podría desear?
Sueños,
 ángeles de collage,
adheridos a su cabello.

Yo lo encontré tirado,
en el suelo de un baño público
y mis manos llenas de mugre.
Yo joven y terco,
hombre mujer.
Ví mi género arrancado
y los ángeles violándolo

En la mesita de noche está escrito
a 100 km por hora
ha caído el hijo
¡perdido!
en una bolsa de escarcha
¡hasta asfixiarse en brillo!

Se corroe mi farsa,
mis labios de cobre.
Cien años a 100 km por hora,
¿qué me queda?
¿Vas a lanzarte?
¡ese es el número!



Los Dioses

En las fosas de la desesperación,
corro con el beat
y me arrastro más profundo.
Hago espacio
hacia el útero como un demonio
violento, que rasga los móviles
suspendidos de la noche.

Jóvenes cautivos en
eternas avenidas
no encuentran su calavera.
Encuentro la mía
que me desviste
con sus torpes dedos
para lanzarme más abajo
más profundo,
para  despedazarme
contra el infinito.

Mi madre llora
porque soy muy joven
para ser tan frustrado.
Me veo en el espejo,
contemplo mi piel
y no hay imagen más falsa.

Hago poemas en luces de neón
para que alumbren la oscuridad
de mis sueños.

Escupo mis noches,
destruyo los ojos del delfín,
quiebro el cántaro del aguador,
entierro a los niños
bisexuales, los escondo del 
mundo.

Me siento tan torpe, tan falsa,
llevando el estandarte de la nada.
Ella me sorprende en el camino
y se abalanza hacia mí como un
animal que vigila desde las
esquinas de mi cuarto.

Derribo a mis ídolos
y  quedo sentada con mi propio
dolor.
Con todo el que puedo crear.

Pero no hay vuelta atrás cuando
mueren los dioses.

Todo parece vacío
cuando la calavera marca la ruta.

Veo el colapso
del paraíso
y los dioses lunares
muertos en su trono
por una sobredosis.

Ellos son tan vacíos como los
dioses del día
y sus huesos tan secos como los míos,
El camino sangra y se inunda de llanto
Pero necesito exprimirlo hasta que
se agote.

Cuando no pueda más
seré como el ave que se estrella
contra el parabrisas.

La muerte habrá desaparecido
Y no podrá amenazarme.

La calavera será sólo un adorno
Esta es mi ofrenda.
Desde el Callejón del Gato

3 comentarios:

  1. El primer poema me encanta cuando inicia " El río parece encriptado
    tumbas llenas de mora
    y este es el cielo
    simple como una esfera
    que gira". La forma en que la noche avanza como la lenta agonía de la vida, la construcción de imágenes que trastocan esa realidad visual en visiones y en símbolos; existe un hilo lógico a lo largo de la pieza,convocando a la misma Eva, al pecado original de morir junto al cuerpo de la poeta, yacente a lo largo de un poema. De los otros, hay pérdida de ritmo, el discurso poético se pierde a lo lejos de un ambicioso despliegue de la imaginería de Carmen, aunque son textos con alas que al final calan,como la mejor de las tormentas.

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  2. Buena nota Noé por visitar la ratonera

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  3. Mi estimado Melvyn: estos poemas son muy interesantes,de una arquitectura extraña y caótica, aún me dejan pensando... en buena hora que lo subás a la red.

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