sábado, 3 de octubre de 2009

Tres poemas y una breve consignación de David Maradiaga




AL SALIR DE BOGOTÁ


Recordarás como un día de la más lejana niñez
el recorrido por aquellas enormes carreteras
y el minuto en que te despediste de ella
descubriendo que algo muy cerca del amor los había envuelto

De seguro había tardes anteriores
a aquella en que llegó el avión desde San José
y muchos señores vestidos de rojo
llevaban y traían equipajes
y los policías buscaban droga

Recordarás porque esos días constituyen
los sueños que en alguna vida llegarás a tener
Verás entonces sus ojos
y los bocadillos que comieron camino a Tenjo
sus relatos sobre el cariño y las carreras
en Bogotá
la noche de poesía y los enredos
antes de salir de madrugada
escuchando todavía la voz embriagada de las tres amigas
y ese bar donde leíste unos poemas
con la cara del hombre que nunca más pasará por ahí

Agradecerás muchas veces que ella te
haya regalado la luna
entre lo mucho que te dio
Su sonrisa empezada en el frío de una visita
a la casa de Bolívar
y unas ciruelas conseguidas al azar
entre el peligro de los delincuentes y la
profundidad de las conversaciones sobre la vida
que nos queda

El futuro nunca iba a ser como en las películas
no tenía el aspecto de aquel volkswagen
que daba la curva en una tarde de Kansas
Terminaba en tus ilusiones
Porque ahora sabes que no te llamas como siempre quisiste
tu nombre será aquel
con el que te despertó tu madre
cuando divisabas en el horizonte de las cobijas
a una mujer que te hacía señas desde alguna parte del mundo
Sabes que esa mujer es el sueño del futuro
una estancia de tu largo viaje
entre las estrellas




Bogotá, diciembre de 1992


*

LA PARED LAS MUJERES Y EL LAGO


Doña Julia
usted no es un ser humano
Yo he visto sus ojos en la tarde
y sus manos sosteniendo el viejo carretón
La he visto detenida frente al Lago de Managua
aquel día que regresó a este mundo
para hablarme

Doña Julia
usted habló de una alegría antepasada
sin mover un dedo
parada entre las ruinas
junto a la pared de lo que fue el Gran Hotel
escuchando las voces de las mujeres ricas
y desnudas que gritaban aquella noche
en que diciembre les caía a pedazos
hasta dejarlas sin cabeza

Doña Julia
usted no puede ser un ser humano
Su cuerpo debió de ascender
de aquel aire abandonado de la ciudad en escombros
Volvió de 1972
cuando comenzó a apuntar hacia el Lago
contándome de las muchachas desnudas
que se hundían para siempre
en las aguas de aquel día

el último de su sonrisa




Managua, 1991


*

PENSANDO EN LA RESACA


Me detesto sintiéndome tan bien
Ya verán por qué lo digo


No sé si porque todos vamos
de seguro a una muerte por nuestra práctica común
pero la Sección de Fumadores
es la más amistosa y entretenida


Stt, 26 de oct. 1994


Seguiré amándote, Hannia Marcela Lucía Lisbeth Marielos Mayela Mónica Blanca Elena Sara Lidia Raquel Amalia Carmen Alicia Eva Magaly Melania Tania Carolina Aurora Alicia Lorena Iris Isabel Mirjam Eda Ingrid...

Pero te amaré más, Etcétera

*

BREVE CONSIGNACION FILOSOFICA


La razón de ser del radiolario sólo es cognoscible en la medida en que se acepte la razón suficiente del paradigma del sinsentido. Y es necio decir cuánta desazón provoca invocar este recurso en estos años. No obstante, ¿existe alguna manera de abordar el asunto que no haya sido traída a los tapetes? Helio de Apiacanto bien apunta en su estudio que el sustrato óntico, en el radiolario, trasciende los holísticos alcances de todos los esfuerzos sistematizadores de la epistemología anterior. En consecuencia, cualquier planteamiento problematizador al respecto, devendrá, necesariamente, en aporía. Parece increíble, no obstante, que algo tan común, tan ubicuo en nuestras vidas como el radiolario, nos presente tantísimos problemas de comprensión. El simple hecho de hacer constar nuestra confusión al respecto, nos proveerá, sin embargo, de la fe en que en un futuro no muy lejano, sea un problema soluble por cualquier párvulo. Como un día sucedió con la existencia de Dios, la humanidad terminará comprendiendo algo tan simple.







2 comentarios: